Productos de perfumería, en el camino de la recuperación
- La perfumería ha recuperado más del 50 % de la facturación que perdió durante los momentos álgidos de la pandemia.
- Destaca la recuperación del canal especialista y la evolución del canal online.
El departamento de perfumería e higiene, junto con el de bebidas, son los únicos que contribuyen al crecimiento del gran consumo en 2021, según ha asegurado Pedro Egea, director de retailers de IRI en la ponencia “Cimientos para el crecimiento del sector de perfumería y cosmética” que ha realizado en la Jornada AECOC sobre “Perspectivas y tendencias en perfumería y cosmética”, que ha tenido lugar el pasado 22 de noviembre. Esta jornada, organizada por AECOC, ha estado orientada a conocer la evolución del mercado, las tendencias que servirán para afianzar la dinamización del sector y las perspectivas de este sobre el comportamiento de la demanda.
Durante este año, el crecimiento del gran consumo es negativo (-1% en valor, YTD) por el efecto de la crisis sanitaria durante el 2020, pero se gana con respecto al periodo prepandemia (6,5% YTD, 2021 versus 2019). Sin embargo, el departamento de perfumería e higiene ha crecido un 4% (YTD), con unas ventas que han contribuido al crecimiento en 194,3 millones de euros.
De estos datos se desprende, como ha señalado Egea, que la demanda de los productos de perfumería están en un camino de recuperación. La evolución en volumen en el canal físico de perfumería fue del 3% en el momento anterior a la pandemia, para pasar a una pérdida del -13,5% durante la época COVID y a una evolución positiva del +7,6% frente al año anterior en el momento actual, cuando la vacunación es un hecho (aunque el dato aún es del -3.6% si comparamos con los datos de hace 2 años).
Por tanto, según se concluye de los datos de IRI, la perfumería a día de hoy ha recuperado algo más del 50% de la facturación que perdió durante la pandemia, una cifra que supone 3.074,6 millones de euros en el canal offline, frente a los 2.828,3 que se registraron en YTD septiembre de 2020 y los 3.333,9 de los mismos meses de 2019.
Según ha explicado Pedro Egea, Cosmética facial y productos corporales son las dos categorías cuya demanda ya supera al periodo prepandemia, con un 4,4% por encima de los datos de hace dos años en el caso de la cosmética facial y un 2,2% en el caso de los productos corporales. Estos datos vienen dados por el impulso de la demanda procedentes de los nuevos hábitos y la socialización que ha vuelto a producirse con la reducción de las restricciones. En este sentido, al analizar los datos de los últimos dos años, se aprecia que la cosmética de higiene ha mantenido una evolución sin grandes altibajos durante este tiempo, mientras que la cosmética de disfrute sufrió un descenso considerable en el momento que se produjo el confinamiento pero vio una evolución ascendente muy notable en primavera de este año, cuando la vacunación se hizo masiva y se redujeron las restricciones que afectaban a la vida social.
Por todo ello, el canal de perfumería y droguería moderna está recuperando, poco a poco, la cuota que tenía antes del COVID. Aunque aún queda lejos el 49,7% de cuota que tenía el canal especialista antes de la pandemia, ya se encuentra en un 41,2%, varios puntos por encima de la participación que tenía durante la pandemia, cuando bajó hasta el 35,9%, donde la cuota pasó fundamentalmente al súper (datos en valor de los productos de perfumería, según canal).
También, aunque con una cuota pequeña, destaca el canal online, en el que los productos de perfumería aumentaron su cuota durante la época de mayores restricciones por el COVID. Este canal fue clave para llegar al consumidor en los meses donde el canal especialista permaneció cerrado, momento en el que vivió una evolución del 104% (en volumen, en comparación con el año anterior).
Egea también ha destacado que, según datos de IRI, la cesta de los productos de perfumería en el canal offline es muy similar al online. El producto estrella son las cremas de belleza femenina, seguido de las fragancias femeninas y del champú. A continuación, destacan en importancia las fragancias masculinas y, finalmente el desodorante (en el canal offline) y los tratamientos corporales femeninos (en el canal online).
Según ha destacado el portavoz de IRI, la pandemia ha tenido una influencia en el gran consumo, debido a la instauración del teletrabajo, una mayor confianza del consumidor y un menor gasto.
Además, a medida que se relajan las restricciones, hacemos cestas más pequeñas y vamos más veces a la tienda, aunque todavía no hemos recuperado los niveles precovid.
Pedro Egea también ha subrayado tres tendencias que marcarán el rumbo del sector: el enfoque en el propósito social y la sostenibilidad, que se materializa en el auge de nuevos productos como el champú sólido, la salud, criterio por el que destaca la nutricosmética, y la omnicanalidad.