¿Puede la clasificación avanzada contribuir a la circularidad de los plásticos en Europa?
Un nuevo informe, encargado por Amcor y TOMRA y redactado por Eunomia Research and Consulting a raíz de su investigación, explora cómo la tecnología de clasificación basada en marcadores y reconocimiento de objetos contribuye a la circularidad y la trazabilidad en el reciclaje de envases de plástico en Europa.
El informe titulado Advanced Sorting for Circularity (Clasificación avanzada para la circularidad), concluye que, para la clasificación de muchos formatos de envases de plástico, una mayor optimización de las tecnologías de clasificación existentes debería bastar para mejorar su circularidad. Sin embargo, para afrontar los verdaderos retos de clasificación, el reconocimiento de objetos podría ser la tecnología de clasificación avanzada más rentable para promover la circularidad, incluso más que la tecnología de marcadores.
El informe, encargado por Amcor, TOMRA y otras empresas líderes del sector, puede descargarse de forma gratuita aquí: Advanced Sorting for Circularity Report – Eunomia Research and Consulting.
En la actualidad, el sector de los envases de plástico se enfrenta a una creciente demanda de mayor sostenibilidad, sobre todo enfocándose en el aumento del contenido reciclado y el fomento de una economía circular. Esta presión varía en toda Europa, pero está impulsada principalmente por las exigencias públicas y gubernamentales, que obligan a los fabricantes a adoptar prácticas más sostenibles. La legislación de la UE asimismo establece requisitos en torno a los envases, en particular el esperado Reglamento sobre los envases y los residuos de envases, cuya entrada en vigor está prevista para finales de 2024.
Este nuevo informe analiza el modo en que las tecnologías de clasificación basada marcadores y reconocimiento de objetos pueden contribuir a la circularidad y la trazabilidad en el reciclaje de envases de plástico, concretamente en países de la Unión Europea, Noruega, Suiza y el Reino Unido.
La metodología del informe consiste en identificar los polímeros y formatos de material de envase que las tecnologías actuales no clasifican adecuadamente para lograr la circularidad. Se evalúan las nuevas tecnologías (es decir, las tecnologías de clasificación avanzadas) que podrían permitir la clasificación y selección de estos tipos de envases de plástico postconsumo. También se examina una serie de nuevas tecnologías de clasificación basada en sensores y marcadores. Se eligieron tres de ellas para realizar una modelización detallada de costes y prestaciones: el reconocimiento de objetos, los marcadores químicos y las marcas de agua digitales.
El estudio se centra en las soluciones de clasificación, que proporcionan una materia prima adecuada para los procesos de reciclado mecánico, que a su vez produce material apto para los fabricantes de envases.
Este enfoque se debe a la hipótesis de que debe explorarse primero el potencial del reciclado circular mediante procesos mecánicos antes de pasar a procesos con reciclado químico.
Las conclusiones del estudio abarcan la circularidad para aplicaciones de plástico rígido y flexible, la trazabilidad y la implantación.
Estos resultados proporcionan una dirección clara para la inversión y la innovación dirigidas a las tecnologías de clasificación, haciendo hincapié en la importancia de alinear las opciones tecnológicas con los objetivos específicos de reciclaje y los requisitos únicos de los diferentes tipos de envases.
A medida que la industria avanza hacia el cumplimiento de los objetivos de la UE en materia de contenido reciclado, esta comprensión detallada será esencial para orientar los esfuerzos hacia unas prácticas de reciclado de envases de plástico más eficaces y sostenibles.
El análisis concluyó que la clasificación avanzada únicamente es necesaria para solventar un conjunto limitado de problemas que afectan a la circularidad. Esto es así en el caso de los plásticos rígidos (PEAD y PP), con aplicaciones sensibles al contacto en las que las actuales soluciones de clasificación no alcanzan los objetivos de circularidad. En el caso de los plásticos flexibles, la clasificación avanzada no es necesaria para producir material reciclado de calidad, pero sí podría serlo para conseguir material apto para el reciclado mecánico. Y, dado que el objetivo de la clasificación avanzada según el modelo es aumentar la circularidad en un flujo de residuos que ya se recoge y clasifica para su reciclado mediante las tecnologías existentes, la aplicación de la clasificación avanzada no aumentará significativamente las tasas de reciclado globales ni en el caso de los plásticos rígidos ni en de los flexibles.
Todas las tecnologías de clasificación avanzadas podrían permitir una mayor trazabilidad, aunque es razonable concluir que ésta sería mayor con los marcadores digitales que con el reconocimiento de objetos. Sin embargo, la trazabilidad requeriría una inversión significativamente mayor que la necesaria para lograr una mayor circularidad y, en el caso de los marcadores, requeriría que se marcaran muchos más envases. Aún se desconoce si existe una disposición a pagar por una mayor trazabilidad.
Es muy probable que el reconocimiento de objetos pueda adoptarse (y podría decirse que se está adoptando) mucho más rápidamente que las tecnologías de marcadores.
El informe concluye que parece probable que se sigan adoptando tecnologías de reconocimiento de objetos, que pueden ofrecer una solución más rentable para la circularidad. Tanto la industria del plástico como los responsables políticos deberían plantearse si el uso de tecnologías de marcadores como solución para el mercado de masas ofrece suficientes beneficios adicionales como para justificar tanto el coste adicional como el complejo proceso de implantación.
En palabras de Andy Grant, director técnico y responsable del proyecto en Eunomia: «Ante el creciente interés por las soluciones basadas en marcadores para clasificar los envases de plástico, las conclusiones de este informe son relevantes para la toma de decisiones en toda Europa y los Estados miembros. Este informe concluye que, para facilitar el reciclado circular en muchos formatos de envases, la aplicación de tecnologías de clasificación avanzadas no es probable que sea necesaria, ya que la tecnología existente es suficiente. Eso sí, en los casos en los que es necesaria la clasificación avanzada, ya estamos viendo algunos ejemplos como envases de plástico rígido, donde el reconocimiento de objetos ya está ofreciendo resultados tangibles. En formatos de plástico flexible, hay que seguir trabajando para determinar cuáles de las tecnologías avanzadas pueden ser necesarias«.