Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP): factores de éxito en su implantación
La RAP (Responsabilidad Ampliada del Productor), o en sus siglas en inglés ERP (Extended Responsibility of Producer), ha demostrado ser una herramienta vital para ayudar a hacer realidad la economía circular. La responsabilidad extendida del productor se define como una estrategia de protección ambiental que hace que el fabricante del producto sea responsable de todo el ciclo de vida del producto y especialmente de la correcta gestión, ya sea devolución, reciclaje y/o eliminación final del residuo de producto.
La Responsabilidad Ampliada del Productor es un enfoque de política ambiental diseñado para trasladar gran parte de la carga de administrar ciertos productos al final de su vida útil, desde los municipios y los contribuyentes a los productores que colocan esos productos en el mercado. Más allá de la etapa de gestión del final de la vida útil, la Responsabilidad Ampliada del Productor también estimula una mayor participación de los productores en el rediseño general de productos y envases, con el objetivo final de reducir el impacto ambiental negativo y garantizar la salubridad.
La legislación de la Responsabilidad Ampliada del Productor a menudo permite a los productores cumplir esto de manera individual o trabajar con otros productores para formar un SCRAP (sistema colectivo de responsabilidad ampliada del productor), y así cumplir con sus obligaciones. Los SCRAP están financiados por los productores y generalmente se establecen como organizaciones sin ánimo de lucro.
El modelo SCRAP está ganando impulso en todo el mundo. La necesidad de implantar los estos sistemas de gestión de residuos en la industria se considera hoy un requisito absoluto para limitar la degradación ambiental y mejorar la eficiencia de los recursos de las economías. Es por ello que cada vez más las empresas necesitan el apoyo de expertos para desarrollar e implantar adecuadamente sistemas colectivos de responsabilidad ampliada del productor en sus sectores. Y en Heura están especializados en ofrecer dicho soporte.
Los consultores medioambientales de Heura son expertos en la recolección y reciclaje de residuos, y residuos de envases y embalajes. Actuando en nombre de los productores, Heura desarrolla sistemas colectivos de responsabilidad ampliada que aseguran a las empresas asociadas a cumplir con la legislación.
Además, para garantizar que los esquemas de SCRAP cumplen sus tareas adecuadamente, es esencial que no exista conflicto de intereses entre el órgano de toma de decisiones de la organización, el operador de gestión de residuos que da servicios a la organización y las empresas asociadas. Para ello lo mejor es confiar una Consultora Medioambiental externa como Heura que no se vea afectada por esos intereses y actúe de forma independiente.
Heura es la única consultora medioambiental en España especializada en la puesta en marcha de Sistemas de Responsabilidad Ampliada del Productor. Eso significa que tenemos experiencia demostrable en diseñar e implementar SCRAP´s para fabricantes y usuarios de productos industriales o comerciales.
Ejemplos de este tipo de soluciones son AEVAE y TECNOWEE, dos SCRAP´s puestos en marcha por Heura para fabricantes de diferentes sectores industriales y que han conseguido reducir el abandono de toneladas de envases de plástico residual, así como de aparatos de iluminación.
Para los fabricantes es muy simple y, a la vez, beneficioso participar en el sistema. Dependiendo del tipo de residuo o residuo de envase, y de la cantidad de productos y/o envases suyos que estén en circulación deberá pagar una cuota. La cuota de licencia cubre todos los gastos de la recuperación y del reciclaje de sus residuos, o residuos de envases, de acuerdo con las leyes vigentes y aplicables. De esta manera dispone de la garantía de estar cumpliendo con sus obligaciones legales.
Este tipo de proyectos permiten a la vez desarrollar, en su seno, iniciativas orientadas a la reducción de impactos medioambientales negativos, lo que siempre deriva en ahorro de costes para los productores.