El proyecto Bioboard presenta un recubrimiento a base de proteínas para crear embalajes sostenibles
A partir de la valorización de residuos de la producción de queso y patata, el proyecto Bioboard desarrolla un laminado para envases de papel y cartón biodegradables y/o reciclables
Bioboard es un proyecto financiado por la Comisión Europea dentro del programa FP7 y coordinado por la empresa española IRIS, en el que han participado un total de 14 socios entre los que destaca Tetrapack, la cooperativa Lleters de Catalunya Llet Nostra, el instituto Fraunhofer y la Universidad de Pisa. El próximo 22 de Octubre se presentarán en las instalaciones de IRIS (Barcelona) las conclusiones del proyecto con un evento en el que participarán, entre otros, la Dra. Elodie Bugnicourt, coordinadora de Bioboard; el presidente de Lleters de Catalunya, Joan Pijoan; y representantes de la Agencia de Residuos de Cataluña. 
Durante tres años el proyecto Bioboard ha trabajado para desarrollar un material de embalaje hecho a base de proteínas del suero de la leche y de los residuos de la patata. Bioboard nació para aportar nuevas soluciones a la búsqueda de materiales de embalaje alternativos, respetuosos con el medio ambiente, con costes de producción asequibles, que mantengan la calidad del producto e incorporen propiedades barrera significativas. Basándose en anteriores investigaciones sobre el uso de proteína de suero de leche para crear capas de plástico biodegradables, el proyecto Bioboard ha desarrollado formulaciones de plástico compuestas de proteínas, con residuos derivados de la industria del queso y de la patata y poliésteres biodegradables producidos por extrusión. El proceso es de especial interés, ya que la plastificación de la proteína, la modificación reactiva, la aditivación han sido optimizados en una sola etapa de extrusión, con lo que el proceso es más sostenible, tanto desde el punto económico como ambiental. Curiosamente, se encontró que la pulpa de la patata, un subproducto de la industria del almidón que también contiene fibras, se puede utilizar como un material de carga para aumentar la resistencia mecánica de las películas basadas en proteínas de suero de leche extruidos.
La primera aplicación de la nueva película biodegradable se realizó en el envasado multicapa a base celulosa, tales
como el envasado en forma de ladrillo para bebidas o bolsas para productos deshidratados, pero también podría ser aplicado en la producción de envases de plástico flexible. Los estudios realizados en el curso del proyecto también han demostrado que es posible modificar las propiedades de las mezclas a base de proteínas, lo que significa que estos también tienen potencial para su uso en envases rígidos, tales como bandejas u otros contenedores termoconformados.
Mientras BIOBOARD ofrece una nueva solución de fuente biológica y extruible, y contribuye al conocimiento disponible sobre la extrusión de proteínas, también exhibe buenos beneficios en términos de medio ambiente, ya que se basa en la reutilización de residuos y promueve prácticas de reciclaje y compostaje para el envase post-consumo.
