Envases para confitería y panadería. El poder de seducción de un buen envase




Envases para confitería y panadería. El poder de seducción de un buen envase

El segmento de la confitería y la panadería es uno de los mejores exponentes de la influencia que tiene la configuración del envase en la decisión del consumidor en el punto de venta. Este es uno de los ramos que más se benefician del negocio con productos de temporada, en los que el envase juega un papel fundamental. No faltan ocasiones para lanzar ediciones especiales: el Día de la Madre, el Día de San Valentín, Pascua, Acción de Gracias, Navidades o Halloween. Las distintas marcas y los fabricantes de envases se superan año tras año ideando nuevos productos, sabores y diseños acordes con las expectativas del cliente. Al fin y al cabo, uno de los deseos más destacados del consumidor es disponer de variedad para elegir. Consecuentemente, una de las principales fórmulas de éxito empresarial consiste en lanzar a menudo productos innovadores. 

Factor de éxito: la nueva diversidad

El fabricante alemán de chocolate RITTER SPORT es consciente de esta tendencia. «El consumo de chocolate tiene cierta similitud con el de vino. Los gustos experimentan un proceso de maduración con el paso de los años. En consecuencia, tenemos que esforzarnos por mantener el atractivo de nuestros productos y ofrecer al consumidor un amplio abanico de sabores diferentes. Así lo hemos hecho con la serie Bunte Vielfalt, que se ha convertido en la esencia de nuestra marca», afirma Asmus Wolff, Director Gerente y Supply-Chain Manager de RITTER SPORT, en referencia a la línea de chocolates cuyo nombre significa «diversidad multicolor» en español.

La serie Bunte Vielfalt de RITTER SPORT estrena con frecuencia combinaciones nuevas que garantizan una renovación adecuada de la gama de chocolates. Foto: RITTER SPORT

La última tendencia del sector de la confitería es el ʹfood pairingʹ, consistente en combinar distintos ingredientes, por ejemplo chocolate con té matcha y arándano rojo, capaces de suscitar experiencias multisensoriales al degustarlos. Por un lado, las variaciones introducidas en la textura, las mezclas y los rellenos de dulces y productos de repostería y panadería, sumadas a los envases de distintos tipos y tamaños, han diversificado la oferta en los supermercados. Por otro, han derivado en un aumento de la complejidad de los procesos de producción. Teniendo esto en cuenta, tanto los fabricantes de dulces, chocolates y productos de panadería como los especialistas en envasado deben ser capaces de anticiparse a los deseos de los consumidores para integrarlos en los planes de producción y en el posterior proceso de suministro.

Rapidez de reacción y capacidad de adaptación

Para satisfacer las exigencias planteadas por la fabricación inteligente (ʹsmart manufacturingʹ) se precisan tecnologías e instalaciones modernas. Más de 1.000 fabricantes del sector de la confitería y la panadería expondrán las innovaciones del ramo en la próxima edición de interpack, que tendrá lugar entre el 7 y el 13 de mayo de 2020 en Düsseldorf. Justo detrás de la nueva entrada sur del recinto ferial, los visitantes profesionales podrán ver soluciones y productos relacionados con la confitería y la panadería en el nuevo pabellón 1 y en los pabellones 3 y 4, e informarse sobre las últimas tendencias que se registran en el sector.

A medida que aumenta la diversidad se acortan los ciclos de vida de los productos y el volumen de los envases. Ante este fenómeno, la maquinaria y las instalaciones tienen que poder reaccionar con rapidez y flexibilidad. Se requieren tiempos breves de adaptación de la maquinaria, procesos sencillos de cambio de productos, cantidades y formatos y también conceptos modulares que ayuden a recombinar o ampliar las líneas de producción y envasado.

Mejora de la eficiencia de las instalaciones

Theegarten-Pactec, especialista en maquinaria de envasado, presentará una novedad absoluta en la interpack 2020. «La nueva envasadora puede realizar diez tipos de envases diferentes y está llamada a convertirse en el referente del envasado primario», anuncia Steffen Hamelmann, jefe de Marketing y Relaciones Públicas en Theegarten-Pactec. «Como los módulos específicos correspondientes a cada tipo de envase son fáciles de cambiar, se puede adaptar fácilmente la máquina a las distintas modalidades de plegado y cierre. Además, la máquina de nuevo desarrollo incrementa de forma patente la capacidad máxima: si antes se envasaban alrededor de 1.200 productos por minuto, ahora se puede llegar a 1.800, siempre en función del tamaño del producto y la modalidad de envasado».

El desarrollo de modernos programas de software permitirá incrementar la eficiencia de las máquinas de envasado para confitería y panadería y facilitará un manejo más intuitivo. Foto: Theegarten-Pactec

El líder mundial del segmento de envases primarios para dulces o chocolates en pequeñas cantidades ha inaugurado un nuevo campo de actividades que presentará en interpack 2020, exponiendo su solución para el envasado secundario. Anteriormente, el alto rendimiento de las máquinas causaba problemas en el punto de enlace con el envasado subsiguiente. La nueva instalación ha sido especialmente concebida para su conexión directa con sistemas de envasado primario de Theegarten-Pactec, a fin de aumentar la eficiencia del sistema completo, es decir, del primer y el segundo envasado.

Ralf Schäffer, Jefe Comercial y miembro de la Gerencia de Sollich Kg, fabricante de maquinaria especial para la industria de la confitería, conoce perfectamente los desafíos que conlleva el mayor deseo de diversidad de los consumidores para el proceso de fabricación. «La gran diversidad de dulces y chocolates hace que sea prácticamente imposible fabricar en serie con la maquinaria. El reto consiste en ser capaces de reaccionar con flexibilidad a pesar del creciente grado de automatización y de los rápidos cambios», explica Schäffer. La empresa familiar Sollich tiene en cuenta los deseos de los clientes y los requisitos especiales inherentes al producto y, si es preciso, construye máquinas completamente nuevas. Todo esto, respetando al mismo tiempo unos plazos de suministro breves.

El mercado de maquinaria para dulces y chocolates

El segmento de construcción de maquinaria para confitería se caracteriza por su alto grado de especialización y por su destacado dominio de las técnicas de procesos. Este ramo está acostumbrado a las fuertes fluctuaciones del negocio exterior, ya que depende en gran medida de proyectos de gran envergadura. En 2018 el volumen total de máquinas para producción de dulces y chocolates en el comercio exterior internacional ascendió a 972 millones de euros, según la Federación Alemana de Construcción de Maquinaria e Instalaciones (VDMA por sus siglas alemanas). Los fabricantes alemanes de instalaciones lideran el ʹrankingʹ de exportaciones, ostentando una cuota de mercado del 35%.

Les siguen los Países Bajos, con una cuota del 16%, y a continuación Italia, que ocupa el tercer puesto con un 14%.

La producción de temporada registra un auge constante en el segmento de la confitería. Los productos salen cada vez más deprisa al mercado. Por ejemplo, las chocolatinas de Pascua empiezan a venderse a principios de año. Foto: Theegarten-Pactec

Los fabricantes alemanes de máquinas para confitería vienen registrando desde 2016 un aumento sustancial de los pedidos con destino a África, Oriente Próximo y Oriente Medio. Por efecto de la globalización, cobran importancia los envases protectores para dulces de calidad, ya que es necesario que estén adaptados a los requisitos especiales que supone la climatología extrema de estas regiones. Por ello, el foco no solo se dirige al diseño, sino también a la hermeticidad del envase, condición indispensable para garantizar una óptima protección del producto. Empresas como Theegarten-Pactec están trabajando para ampliar la oferta de envases atractivos, más allá de las bolsas habituales, y que además sean aptos para proteger convenientemente los productos en climas tropicales.

Los distintos productos requieren conceptos diferentes de fabricación y envasado. Foto: Sollich KG

Protección e higiene

Un tema prioritario para el ramo de la confitería y también para la panadería es la necesidad de garantizar unas condiciones de producción seguras e higiénicas. Las máquinas e instalaciones se desarrollan conforme al criterio del diseño higiénico, para satisfacer las elevadas exigencias de higiene en la producción de conformidad con las normas y directivas internacionales. A tal efecto se evita, ante todo, que las estructuras presenten rincones y espacios huecos en los que puedan acumularse restos de productos, microorganismos o suciedad. De este modo se reducen las tareas de limpieza, se acortan los tiempos de inactividad y se minimiza el desperdicio de material. Al mismo tiempo aumenta la productividad de las instalaciones.

Los métodos CIP (ʹCleaning in Placeʹ) han ido extendiéndose en el transcurso de los últimos años. Unos sensores CIP especiales avisan cuando detectan la necesidad de limpiar una máquina. Con ello se evitan procesos de limpieza exhaustivos e innecesarios y, por tanto, se ahorra agua, productos de limpieza, energía y costes.

La producción de bollos, panes y panecillos está sujeta a condiciones higiénicas muy estrictas. Estos productos, especialmente el pan, ofrecen un caldo de cultivo ideal para la proliferación de hongos. La formación de moho siempre es resultado de una recontaminación, ya que todos los productos de panadería y bollería salen del horno libres de gérmenes.

Mediante procedimientos especiales y envases adecuados es posible alargar la durabilidad de los productos de panadería y bollería. Con ello, los panes envasados en fábrica pueden conservarse hasta tres semanas, en función del tipo de pan. En el caso de productos de pequeño tamaño como los panecillos precocidos, las panificadoras utilizan el intercambio de atmósfera en el interior de las bolsas de envasado para prolongar la durabilidad del contenido. Para ello se sustituye el oxígeno del interior por gases libres de oxígeno.

Para la producción de productos panaderos tanto el personal como la maquinaria deben cumplir exigencias máximas de higiene. Foto: Bühler Group

Otra posibilidad es la pasterización. En este proceso se mantiene constante la temperatura de horneado a 75 grados centígrados durante un período prolongado de tiempo. Para ello suelen utilizarse bolsas convencionales de polietileno con cierre de clip. Este evita que se forme una presión excesiva, que haría que se hinchara la bolsa durante el proceso de pasterización. Además, tiene la ventaja adicional de ser fácil de abrir y cerrar.

La seguridad de los productos alimenticios es un aspecto que seguirá cobrando importancia debido a la imparable globalización, a la creciente complejidad de las cadenas de creación de valor y al cambio de costumbres entre los consumidores. Asimismo, el cambio climático será un factor a tener en cuenta para la seguridad de los alimentos, especialmente en lugares afectados por cambios de temperatura que repercutan en la seguridad de los productos alimenticios durante su producción, almacenamiento y distribución. Estos factores, sumados al crecimiento de la población mundial, se traducen en nuevos desafíos para la seguridad global en el sector alimentario. En vista de ello, los productores y procesadores adquieren una responsabilidad creciente por lo que respecta a la producción de alimentos seguros y sostenibles.

Gracias a la digitalización y a la automatización, las máquinas de las panificadoras ganan eficiencia y flexibilidad para adaptarse al cada vez más frecuente consumo de bocadillos, pastas y aperitivos fuera de casa. Como consecuencia del cambio de pautas de consumo y alimentación y del aumento de la proporción de productos envasados en porciones individuales ha ascendido la producción mundial de máquinas panificadoras. Esto queda patente en las cifras de comercio exterior internacional de máquinas panificadoras, incluidos hornos no eléctricos: según los datos facilitados por la federación VDMA, la facturación superó los 2.700 millones de euros en 2018. Con una cuota de mercado del 31%, Italia es el mayor fabricante y exportador de máquinas panificadoras, incluidas las destinadas a fabricar pasta. Los fabricantes alemanes de este tipo de máquinas ostentan el segundo puesto, con un 11%, seguidos por los Países Bajos, con un porcentaje del 7%.

Soluciones sostenibles

Una de las principales prioridades de todos los participantes en esta industria es conseguir una producción y un envasado sostenibles de los productos de confitería y panadería. En vista del calentamiento global y del aumento de la población mundial, que rozará los 10.000 millones de personas en 2050, urge encontrar soluciones. Algunas ya se han hecho realidad, como podrá comprobarse en interpack 2020.

El consorcio multinacional Bühler ofrece, entre otros artículos, el molino industrial Mill E3. Gracias a la cinta transportadora tubular TUBO, al sistema de molido integrado y a la mesa modular de esclusas se requiere un 30% menos de espacio y un 10% menos de energía. La productividad, por contrapartida, aumenta varios puntos. Los nuevos hornos como el Franz Haas SWAKT-Eco para galletas planas y rellenables permiten reducir un 30% el consumo de gas e incluso un 90% las emisiones.

Kellogg dona productos descartados para la venta al público. En Inglaterra se aprovechan desperdicios de la producción alimenticia para fabricar cerveza. Foto: Kellogg

Con sus Networking Days 2019, Bühler fue una de las empresas que a lo largo del año pasado demostraron que este ramo industrial está dispuesto a asumir responsabilidad y aportar soluciones para un mundo sostenible, en el que se reduzcan al mínimo el desperdicio y las pérdidas innecesarias de productos alimenticios. Ian Roberts, responsable de Tecnología, se expresó con claridad: «Tenemos que transformar radicalmente el comportamiento del ramo, de las empresas y de las personas». Por este motivo, su empresa ha decidido fijarse objetivos más ambiciosos de sostenibilidad y añadirles el aspecto del consumo de agua. Bühler se ha propuesto conseguir un ahorro del 50% con su próxima generación de sistemas de procesamiento. Esto significa, concretamente, que consumirá un 50% menos de energía y de agua, respectivamente, y que generará un 50% menos de desperdicios.

Con esta meta a la vista, Bühler se convierte en ejemplo a seguir en el sector de la confitería y la panadería. Para alcanzar los objetivos climáticos mundiales se necesitan soluciones sostenibles de este tipo. Para ello debe intensificarse el uso de tecnologías digitales y consolidar las cooperaciones con los clientes, los proveedores y las empresas emergentes.

www.interpack.com

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